La interminable catedral de Barcelona
Hoy(ayer) se acaba al fin mi lectura del librazo ese gigantesco de
Ildefonso Falcones: "La Catedral del Mar". Libro que llegó a mis manos
por medio de mi otro yo. Ya tiene muchísimo rato que lo tenía pero lo
comencé en diciembre y al fin lo terminé. Digo en mi defensa que tardé
por esa locura de empezar una maestriya.
Como siempre, una breve reseña de lo que leí y que me gustó,
intentando no spoliear nada para quien quiera leérselo por su cuenta.
La historia es en escencia la vida paralela de Arnau Estanyol y la
Catedral del Mar. El comienzo trágico y sin futuro de un niño
semi-desamparado que a lo largo de su vida, gracias a diminutas
coincidencias y mucho sacrificio logra salir adelante. La religión
juega un papel importantísimo en todo lo que sucede como motivación al
principio y como dilema existencial al final.
La envidia y el aprovechamiento de los hombres en un mundo machista es
lo que me asqueó del libro. Pero viéndolo imparcialmente, no es el
libro el que inventa estos hechos, lo dice la nota del autor al final,
es que así sucedía en realidad en aquéllos tiempos (1300 - 1400).
Cumplió con hacerme sentir mal, enojado y molesto contra esos ideales,
eso le da puntos.
Lo que me pareció demasiado es que hay como 7 nombres para todos los
personajes. Hay cientos de Arnau's, Joan's, Guillem's, Bernat's, que
no te revuelven pero da coraje que no haya más nombres. Digo, en cien
años de soledad juegan un papel de laberinto y todos son familiares,
acá no, cualquier tipo en la calle se llamaba Joan o Bernat etc…
En general es una lectura tranquilota, sencilla, con intrigas sobre
poder y bastante injusticia. Buenón, pero no figurará en mis
favoritos.
Aquí comenzaré a copartir de manera escrita las frases que me gustaron
del libro. Siempre las apunto pero las guardo para mí y ahora creo que
es buen tiempo de publicarlas.
13 – cuyas virtudes superaban la fuerza del buey y la belleza de la
más increíble puesta de sol.
29 – nunca te fíes de quienes dicen servir a Dios.
83 – Quédate con nuestras tierras, señor de Bellera; nosotros nos
quedamos con nuestra libertad
90 – No hay nada mejor en este mundo que un buen amigo, tenedlo
siempre en cuenta
91 - ¿porqué sonríes?
Joanet siguió caminando antes e contestar:
Ella siempre me dice que debo sonreír.
99 - ¡Todas las iglesias son de hombres!
135 – Los ricos son diferentes, le habían dicho siempre; quizá ellos
tuviesen otra manera de encontrar una nueva madre.
136 – Tal vez no seamos ricos, pero nunca seremos artesanos.
145 – De la ventana ya sólo salían sonidos apagados; sí, no, ve,
corre, corre a vivir.
Corre a disfrutar de esa vida que por mi culpa no tuviste.
147 – Haz tenido que morir para que pudiéramos estar juntos.
157 – las siete artes liberales: gramática, retórica, dailéctica,
aritmética geometría, música y astronomía.
166 – No podemos luchar contra los nobles y tenemos que trabajar.
181 – Déjalo, mujer. A partir de hoy no volverá a ser un niño.
183 – No hay libertad con hambre.
223 - ¿Cómo iban a ser normales aquellos ojos? Y le habían sonreído, las dos.
225 – Algúm día, en vida de nuestros nietos, o de sus hijos, o de los
hijos de sus hijos, cuando la gente mire esta obra, no hablará de
Berenguer de Montagut; lo hará de ti, muchacho.
226 – Lo que te aseguro es que será único, y lo único no es ni mejor
ni peor, es simplemente eso: único.
240 – Mulier si primatum habuerit, contraria esr viro suo
- Qui delicate nutrit servum suum, inveniet contumacem
264 – Todo buen cristiano debe casarse y traer hijos al mundo
269 – Cuando él respiraba Maria corría a traerle el aire.
270 – Las mujeres han nacido para eso, para contraer matrimonio, para
servir al hombre.
283 – Simplicidad radical, pobreza absoluta y humildad.
316 - ¿Cómo explicarle a una criatura que la verdadera razón por la
que la Iglesia sostenía aquella máxima era para evitar el adulterio o
las relaciones contra natura?
319 – La mente del hombre es retorcida, y por lo general le gusta
creer siempre lo peor.
325 – No quedarían nobles en el mundosi tuviesen que jurar del mismo
modo sobre sus iguales…, sobre todo tratándose de lealtad.
340 – Y allí, delante de la Virgen, juró que nunca volvería a dejarse
llevar por la lujuria.
355 – intentaron defender el barrio de los constantes asaltos a los
que lo sometía un pueblo enloquecido y enfervorizado que, en nombre de
la cristiandad, enarbolaba la bandera del saqueo y el linchamiento.
362 – No somos más que juguetes en manos de los nobles.
367 – hay algo que nunca cambiará en la historia: el que tiene dinero quiere más
371 – Así seguirá siendo por más agua bendita que derramen sobre mi cabeza.
403 – alrededor de una botella de vino dulce, los dos hermanos
recuperaron los trece años de separación.
451 - ¡Os declaro libres!
453 – Somos lo que somos y de nada nos serviría, ni a ti ni a mí,
recordar cómo hemos llegado a serlo
- no pienses en la honra: no está hecha para el pueblo.
466 – Por este motivo el hombre dejará a su padre y a su madre y se
adherirá a su mujer y los dos serán una sola carne.
467 – Sólo Cristo resistió las tentaciones.
- De todas las cosas bellas que he visto, las que más me han gustado
son los diablos esos que turban el mundo.
475 – pero la lujuria pudo más que su palabra de caballero.
490 – es peor quien admite el pecado que el que peca
505 - ¡Dios no puede obligarme a yacer contigo!
509 – conocía el precio de los esclavos, pero ¿cuánto valía un amigo?
511 – El juramento ante la Virgen le ataba ahora más que nunca: estaba
condenado aser fiel a una mujer que no le amaba y a la que no podía
amar. Y a renunciar a la única persona con quien podía ser feliz…
533 – Las mujeres han nacido para servir a sus hombres; ésa es la ley,
terrenal y divina.
537 - ¿Acaso no cumplimos los preceptos de la Iglesia tratando a los
pobres como lo que son?
557 – El tiempo trae el olvido, hasta el amor de una madre.
573 – "No intento competir contigo", intentó decirle en un lenguaje
que sólo dos mujeres pueden entender.
578 – vivía encerrada en sí misma, volcada en trabajar unas tierras
desagradecidas, tratando de que las espigas y el sol comprendiesen su
desgracia y se apiadasen de ella.
593 – No se puede perdonar a quien no se arrepiente
649 – Mar se abrazó a Arnau con fuerza y el mundo volvióa la realidad.
662 - ¿La ves sonreír, hijo? – le preguntó.