Tenía muchísimo de no escribir nada. Y no porque estuviese en el imbo haciendo nada, todo lo contrario, tal es mi apuro estos días que ni chance de escribir mis notitas me ha queda'o.
La semana pasada estaba yo en camino hacia el depa de un desconocido en la ciudad de México. El betún. Estudioso tecnólogo y psicólogo. Chambeador y tiene la misma vajilla que usamos en mi casa en los años 90's. Un tipazo nos dejó dormir en su sala y nos desperto justo 5 minutos antes de que llegara el taxi que nos llevaría al Shuttle que nos llevaría al avión que nos llevaría a Monterrey.
Estuve en México porque era parada obligatoria antes de llegar al Festival Colmena 2008 Salí muy satisfecho del evento, pues no es que la pésima orgnización con personal chilero que no distingue la derecha de la izquierda, o que la falta de iluminación en las rutas de salida, o la falta de camiones suficientes para transportar a todos los asistentes o la desorganización al momento de llevarnos al pueblo en que sería el concierto, o que los mismos choferes no tuvieran idea de cómo salir de la ciudad de México, menos el que aún sabiendo salir, no supieran llegar al luagr del evento, tampoco el hecho de que el Line-up cambiaba aleatoriamente mientras pasaban los días; hubieran estropeado el viaje, no señor, la compañía te hace que todo lo antes mencionado aunado a la indisposición de Orri por haberse echa'o unos tacos de suadero bien cargados con chimichanga o algo así venenoso pa' estómagos islandeses, quede atrás. Que el viaje haya sido una gran experiencia.
Nuevamente, el lado de los organizadores no pudo ser más pitero, como el borras, digno de reproche y de todas las calumnias que ya muchos han expresado en tiempo aunque no en forma. Yo lamento mucho no haber podido llegar a tiempo para ver a Natalita, tenía la verdad muchas ganas de verla. Será a la otra pues, en cambio me tocó fumarme a un grupo vestido de apicultores de los 30's con voces alteradas por computadora cantando entre inglés y español haciendo una imitación vil, aburrida y pobre de alguien que no se debe imitar: Björk.
Vaya hay voces que nacieron para ser únicas en el sonido y en lo que interpretan.
Lo demás estuvo tranquilo con un clima digno de la capital regiomontana, pero en un pueblito escondido como Tepoztlán a.k.a. Santo Domingo Ocotitlán. Lo digo por lo cambiante, llegamos con un solecito agradable calientín a las 3 de la tarde (debimos llegar 2 horas antes, pero ya ven, la organización de 2abejas así nos la jugó) Después se nubló, hubo aigrecito, chispeó, dejó de llover, y se hizo de noche ni fría ni calurosa... suave.
Lo que escuchamos de Jonsi y compañía la verdad que fue especial, ¿valiendo la pena cada coraje hecho por colmena? no, tampoco es para tanto. Tal vez si hubieran cuidado adecuadamente de Orri, y no estar a la mera hora voceando a:
"La doctora Estéfany... que anda entre todos ustedes en algún lado, favor de presentarse en el escenario"
Tocaron poco, pero como los grandes, las rolas que pudieron tocar completos. Orri tuvo que salir. Escuchamos música islandesa, o inventada ahí mismo, da igual, y el himno de islandia con un grupo ahí medio sorpresa. Después Sigur Rós continuó el show sin el bataco pues los habíamos esperado mucho. Hay buenos videos por ahí en el yoteví del evento. Me quedo con 2 momentos de todo ese viaje:
- Svefn-g-englar. TyyyyiiiuuuuAAAAAA.... UFFF
- Aplausos y papelitos en la penúltima canción.
Por hoy es todo... les dejo la imagen conmemorativa del evento, hecha en 5 minutos.