El día sagrado del hangover
Eso fue lo que contesté a uno de mis peers el día de hoy para justifcar mi falta a uno de los sábados de reposición por lo del famoso huracán potrillo alex. Obvio lo dije a tono de broma porque suelo hacer ese tipo de declaraciones. Pero de broma en broma…
Esto es debido a que el viernes tenía el propósito de ir a la fiesta de un cuate que conozco desde prepa, con uno de mis bro’s que también conozco desde prepa. “Beber hasta morir” era más o menos la idea, y no es que yo sea un borracho empedernido sino todo lo contrario, me gusta seleccionar una fiesta cada 2 meses en las que me permitiré que el alcohol se suba más de lo medicamente recomendable (Hey tengo amigos doctores que sí recomiendan eso de la copita casual).
Total que falté al cumpleaños de un amigo, porque se me empalmaron los eventos. Llegando a la fiesta, me topé a una amiga que no veía desde hace 9 años que salimos de la prepa y tuvimos chance de ponernos al día. “La ciudad es un ranchote” dijimos al notar que una amiga suya venía con su marido y resultó ser un ex compañero de trabajo, ya saben de cuando renuncié.
Cervezas, Pizza, Rock band y Jaggermeister fueron la combinación de la noche. A eso de las 7 am (creo) nos quedamos dormidos para despertar a las 9 porque el dueño de la casa (el papá del que ofreció la casa) sacó a un perro a pasear se vió chistoso porque el señor es más alto que yo y el perro no le llegaba ni a la mitad de la espinilla.
Ya, me toca documentar mis días porque luego se me olvida cuándo fue la última vez que suceden este tipo de cosas. Do you get that feel sometimes or is it just me?