¡Toritoooooo!
Hace una semanilla me regalaron un par de hijos... no tenían nombre aún. El pequeño (a pesar de nacer ambos el mismo día) parece que se llamaría "Canita" se enfermó hace 3 días al igual que su hermano mayor.
Antier en la noche lo ví débil y cansado, lo llevaron al veterinario ayer por la mañana, compramos sus medicinas, suero, leche para bebé, goteros y demás menesteres para la recuperación de mis bebés (3 meses aprox).
Ayer entre frasadas y enfrente de la estufa de la cocina, Canita se enfriaba poco a poco, yo casi sudo de la frente al avivar a su hermano, mi madre, sólo sujetaba a Canita entre colchitas. Tomaba poquita agua, poquito suero, reaccionaba y abría la boca. Está comiendo, es buena señal, dijo mi madre. El veterinario aseguró que se salvan, sólo hay que hidratarlos y darles mucho calor, porque es lo que tienen, hipotermia, añadió.
Yo estuve a punto de ahogarme en una alberca por el mismo motivo, me enfrié en las aguas y dejé de nadar. me hundí en la alberca al llegar a la orilla y me golpeé la cabeza al intentar pararme para asirme de la orilla. Creo que es hereditario. Ayer al rededor de las tres de la tarde, canita mi primogénito falleció de hipotermia y algún virus de esos que se ponen de moda en tiempos invernales.
Un deceso más en enero, un hermano dolido y enfermo que extraña a su compañero de sueños y abrigo en las noches, no será el mismo ya que lo llora cada que quiere dormir y sentirlo a su lado. Yo continuaré cuidando al que me queda, pero es una lástima haber perdido a uno tan joven y tan simpático como canita. Por eso detesto el frío.
1 commento:
eh, yo vine esperando el cuento de tus picoso-aventuras...
:S salí bailando... XD
Posta un commento