Rey del Cabrito... ¡que maje!

Me han sucedido un restal de cosas estos días.
Y ni tiempo, la vdd que no... de hacerlas todas a tiempo.

Lo que más me ha gusta'o de esta última semana es que cumpló años "mi mamidín" y le pichamos la cenita en el Rey del Cabrito. Y aunque yo no soy un experto conocedor de terminología culiniaria ni mucho menos; sé lo que me gusta comer y lo que no.

Ese día le caimos tardísimo al restaurant pero comoquiera nos tocó vación, lo cual estuvo excelente. Ordenamos medio cabrito y quesillo flamea'o. Error.

En general el plato de cabrito estaba suculento, fácil de quitarle lo sabroso a los huesosos y con el hambre que traíamos, uFFF... deli deli. Lo que no me latió nada nadita nada fue el queso. No soy fan del queso, pero cuando lo "flamean" según yo debe estar aguadito y fácil de echar a las tortillas y con bastante chorizo y todas esas cosas que disparan el colesterol a las nubes. Con un resto de aceites y... (pspspsps ssss se me hace agua la cabeza nomás de pensarlo) bueno ya saben... un buen queso. Pero acá no solo lo cobran como si lo hiciera El Rey del Queso con sus propias manos, sirven una porción muy no llenadora y la cantidad de chroizo y grasocidad... deja mucho que desear a un comedor de colmillo filoso.

Pedimos 2 veces una soda y nos la cobraron doble... después corrigieron el error, digo ... no es que no pudiésemos pagar la soda extra, pero pagar por algo que uno no disfruta en lo más mínimo, se me hace una barrabasada de lo peor.

Salimos con el corazón contento, no lo niego, las carnes queahí preparan vaya que bastaron, y la prueba está en que como no desayunamos, eso fue lo único que comimos ese día. ¡Súrtete!

Pero repito... su queso suckea big time.