Estado de jardín
Ayer le cayó Myriam a la casa, le había prometido ver la película de Zach Braff con ella. Y aunque llegué tarde (sí ¡a mi propia casa!) conseguimos unos taquillos, refresco y botana y vimos el filme.
Me gustó, aunque soy más dado a que no se hagan comentarios cuando veo películas, al menos no cuando es por primera vez, y que el silencio haga que el sonido de la misma me nevuelva y sentir más lo que se ve, se dice y lo que se infiere.
Repetir lo que acaba de decir el actor/actriz no es mi idea de ver una película, por lo que ignoraba lo que mi hermana dijera. Realmente conmovían algunas escenas que de haber habido más silencio, la plática entre Largeman y su padre, podría haberme golpeado más. Suerte que no fue así. Me gustó mucho que la historia fuera tan específica que la hace tan familiar, y los detalles que se tienen mutuos, me inspiraron, aunque no los copiaría, al menos no muy facilmente, pero me sugirieron ideas para unos cuantos de mi propuia ·autoría·, aunque no sea del todo mía, por hallar inspiración en el fime; mas... ¿qué sería entonces enteramente de mi autoría si todo tiene influencias en mí?.
En fin, podría ocultar que la chica interpretada por Natalie Portman me recordó a cierta mujer que se expresa para conmigo de una manera a la que aún no me acostumbro, y su peculiaridad más. Myriam me comentó que sabía que lo relacionaría con la chica de la que hablo, y pues no pudo acertar más. Pero es un secreto así que si la ven en la escuela de medicina de la uni, estudiando o los domingos en la madrugada gritando: "107" no le digan ;)
Ya me toca desocupar la línea y leer más de la historia de Goethe antes de empezar con Fausto. Así que ahí les comento luego como me fue.
¡Abur!
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